Casting para Luna Lovegood

Iba caminando por los pasillos del 4to piso mirando cada una de las obras de arte que se movían y hablaban mientras yo pasaba por delante de ellos. Hablaban de diferentes cosas y con diferentes cuadros que estaban al lado suyo. Sonreí al ver a un pequeño bebe en los brazos de su madre, pero unos gritos hicieron que me sobresaltase- Vaya con la juventud…-dije tranquila imitando a mi abuela y mirando como una chica gritaba a su novio por haberse liado con su mejor amiga, me di media vuelta y fui al gran comedor. En la mesa de Ravenclaw no había nadie con quien tuviese una gran confianza, dirigí mi mirada hacia la mesa de Slytherin y ahí pude ver a Draco Malfoy, los chicos que le rodeaban me miraban y se reían, sonreí levemente y les saludé. La verdad es que no me importa que me critiquen, soy como soy, miré la mesa de Gryffindor y ahí estaba Neville uno de mis grandes amigos, me senté a su lado y le saludé- Hola Neville –le miré mientras bajaba el periódico que estaba leyendo- Ho-Hola Luna –me dijo mientras miraba a su alrededor, cogí mi collar y comencé a jugar con él. Mientras sentía la mirada de unas cuantas personas. Alguien me tocó el hombro, me giré y pude ver a Pansy Parkinson- Necesitas algo? –le pregunté aún jugando con mi collar.- Tengo que preguntarte algo…- me dijo mientras se cruzaba de brazos y sus secuaces igual. –Claro, pregúntame- sentí un pellizco en el brazo derecho, era Neville que también me miraba- Porque eres tan Lunática? –dijo riéndose.
-No soy ninguna Lunática, solo que creo en cosas que otras personas no creen-le contesté mirándole a los ojos. Creo que se enfadó porque se fue con sus seguidoras a la mesa de Slytherin.
Miré a Neville, no sabía lo que le pasaba- Crees que Pansy Parkinson tiene torposoplos en la cabeza? Porque yo si- sonreí- Te apetece ir a los jardines de Hogwarts? –le pregunté mirando la salida- Em…vale –me contestó, así que me levanté del banco y le cogí de la mano, luego salimos del gran comedor para salir a los jardines, le solté y comencé a dar saltitos en dirección a mi sitio favorito, llegamos y me estiré en el césped. Sentí que Neville hico lo mismo.
-Sabes? Me encantaría tener un animal que me llevase volando a cualquier sitio- me contó mirando el cielo oscuro.- Los thestrals pueden hacerlo –le dije mientras miraba una estrella que titilaba, pensando en lo gracioso que sería ver a Pansy Parkinson arriba de uno de ellos, pero sin poder verlos.